La mañana del miércoles 15 de abril el Foro Ignaciano de Frontera Sur en Nador dedicó varios talleres simultáneos a profundizar sobre el tema de Frontera Sur y Derechos Humanos.
En uno de los talleres, el líder de uno de los asentamientos nos presentó el día a día de las personas que viven en Selouane y el monte Gurugú, en muchos casos personas que huyen de situaciones de hambre, violencia y buscan un futuro mejor para los suyos.
Asimismo, se simultaneaba con un taller sobre asilo y devoluciones en caliente en frontera. El control migratorio no puede ejercitarse a cualquier coste, y la protección de vidas humanas es un imperativo moral y legal, una línea roja que nunca deberíamos traspasar. La situación actual en la Frontera Sur hispano-marroquí presenta situaciones tremendamente injustas a través de las expulsiones en caliente y el concepto operativo de frontera.
Por último, un taller sobre tráfico de personas. Hay algunas realidades en frontera que dejan aún más desprotegidas a algunas personas y que las denigra hasta límites que desconocemos. ¿Quiénes se aprovechan de la trata de personas sobre todo con fines de explotación sexual? ¿Cómo se puede calificar a una sociedad que denigra, que no auxilia a las personas inmigrantes? “Una sociedad enferma” (Monseñor Agrelo, obispo de Tánger).
Para profundizar en este tema os recomendamos este informe del SJM España